Hay anarquistas que prevén y preconizan otras soluciones, otras formas futuras de organización social; sin embargo, ellos quieren, como nosotros, destruir el poder político y la propiedad individual: quieren, como nosotros, que la organización de las funciones sociales se haga espontáneamente, sin delegación de poder y sin gobiernos; como nosotros, quieren combatir a todo trance y sin tregua hasta la completa victoria; ellos son compañeros y hermanos nuestros. Aparte, pues, todo exclusivismo de escuela; entendámonos más bien sobre el camino y sobre los medios, y adelante.
Enrrico Malatesta
Con los primeros vientos de abril los comicios en Bogotá dan inicio; primero en la Universidad Distrital, donde el Consejo Electoral y el señor rector encargado Gustavo Montañez citaron a elección de estudiantes para los órganos de dirección y control en la universidad. Estos señores, imagino que en un acto de desconocimiento histórico, citaron a votaciones el día 16 de mayo, día en que se conmemora la muerte y desaparición de varios estudiantes en las instalaciones de la Universidad Nacional en el año 1984, tras cruentos enfrentamientos de los estudiantes con las fuerzas represivas del estado donde policía montada, motociclistas y policía en general (tiras y de uniforme), masacraron la protesta estudiantil y dejaron esparcida sangre y consignas por doquier de los grupos estudiantiles manifestantes.
Los estudiantes miembros del Consejo Electoral de la Universidad Distrital, no se percataron de esta afrenta histórica o simplemente su capacidad no les permitió recordar estos momentos funestos para el movimiento estudiantil. Los profesores que hacen parte de este Consejo de forma ruin y mezquina aprobaron esta fecha. ¡QUE ATENTADO A LA DIGNIDAD Y A LA PROTESTA ESTUDIANTIL!
Varios estudiantes en su afán por figurar y obtener un poco de la torta presupuestal se inscribieron como candidatos para ser elegidos como representantes ante estos órganos políticos, en donde encontramos al señor Carlos Robayo, actual representante de los estudiantes ante el Consejo de Facultad de Ingeniería, al señor Wilson Martín, actual representante de los estudiantes ante el Consejo de Facultad del Medio Ambiente, y al señor Andrés Camacho, actual representante de los estudiantes ante el Consejo Superior. Estos tres personajes además de haber sido elegidos por un tiempo fijo para la representatividad en sus diferentes instancias, hacen parte de la alianza maquiavélica que respaldo la campaña del actual representante al Consejo Superior Miguel Ángel Barriga y del representante al Consejo Académico Joaquín Sandoval, quienes de forma improcedente y dolosa manejaron los hilos de Bienestar Institucional y de la Unidad de Extensión IDEXUD, llevando a estas dos dependencias a un grado de corrupción innombrable.
La participación en política tiene unos deberes y el más importante en el juego de la democracia es la responsabilidad ante sus electores, y estos señores demostraron en el transcurrir de este tiempo que el carácter de responsabilidad no esta inmerso ni en su discurso ni en su praxis y ahora lo demuestran de forma categórica dejando de lado las responsabilidades ante los Consejos a los que cada uno de ellos pertenece para saltar a la arena política de las elecciones 2007, con la única intención de defender los feudos obtenidos por el señor Sandoval y el señor Barriga, bajo el respaldo incondicional de Jorge Ramírez y Rosendo López, con el agravante de continuar en la búsqueda del detrimento académico por el que llevan a la Universidad Distrital los diferentes grupos de poder político que tienen cuna en esta institución.
Quedan otras dos listas, una de ellas en cabeza del señor Juan Carlos Toro y la otra en cabeza del profesor Mauricio Bueno (pues el nombre de los estudiantes de la Facultad Tecnológica no importa porque esta lista es propiedad de este señor, que pretende por todos lo medios apoderarse de la universidad, ya lo hizo en ASPU, ¿que más viene?), el señor Juan Carlos Toro es reconocido por su trayectoria política en la Universidad y en la localidad Ciudad Bolívar, donde habita, fue funcionario de Bienestar Institucional y de forma injusta no fue renovado su contrato por parte del señor Jorge Ramírez por ser amigo de los organizadores del Festival de Rock Universitario y bajo la presión del señor Barriga y del señor Sandoval quienes lo consideraban un peligro para sus turbios intereses en Bienestar, específicamente en la sede Macarena, donde el señor Toro desarrollaba sus obligaciones del contrato.
Realizando un mapeo de las pretensiones de cada uno de los candidatos y teniendo en cuenta su lastre político, intentando ser bastante objetivos en el análisis, podemos concluir lo siguiente:
1. Los candidatos que se postularon para ser representantes de los estudiantes ante los diferentes órganos de dirección y control de la universidad presentan en general el mismo plan de acción, según sus comentarios e historial retórico.
2. Los anquilosados poderes de la universidad y los nacientes, están aceitando su maquinaria para ponerla al servicio de uno de los candidatos pues todos ellos esperan contar con el voto del estudiante en el Consejo Superior Universitario para la elección de Rector por tres años.
3. Algunos de los candidatos esperan que lo poco que dejo Miguel Ángel Barriga y Joaquín Sandoval en Bienestar y en el IDEXUD aún se lo puedan repartir.
4. Como ha pasado por siempre en las elecciones y consultas en la Universidad Distrital, ganará no la mejor propuesta, ni las más consecuente con las necesidades de los estudiantes y de la universidad en general, si no que triunfará la más corrupta y la que más negociaciones haga con Antonio Caicedo, con Samuel Arrieta, con Jorge Ramírez y con Manuel Flores, como ha ocurrido en los últimos 10 años.
Como Grupo de estudio y debate político, les hacemos un llamado a todos los estudiantes de la Universidad Distrital para que se preocupen un poco por el futuro de esta institución, si bien es cierto que ya que estamos aquí nada peor nos puede pasar, tenemos una obligación moral y ética con la sociedad y es entregarle una Universidad de la que no nos avergoncemos y no se avergüencen, tenemos un deber político y es derrocar el poder establecido y la propiedad individual y debemos continuar el proceso donde la organización de las funciones sociales se haga espontáneamente, sin delegación de poder y sin gobiernos.
Bienvenido el representante que tenga esto en su plan de trabajo, no por nuestro impetuoso respaldo pero si porque puede estar seguro que la comunidad lo respaldará incondicionalmente y lo llevará al triunfo del estudiantado en nombre y cabeza de él.
Enrrico Malatesta
Con los primeros vientos de abril los comicios en Bogotá dan inicio; primero en la Universidad Distrital, donde el Consejo Electoral y el señor rector encargado Gustavo Montañez citaron a elección de estudiantes para los órganos de dirección y control en la universidad. Estos señores, imagino que en un acto de desconocimiento histórico, citaron a votaciones el día 16 de mayo, día en que se conmemora la muerte y desaparición de varios estudiantes en las instalaciones de la Universidad Nacional en el año 1984, tras cruentos enfrentamientos de los estudiantes con las fuerzas represivas del estado donde policía montada, motociclistas y policía en general (tiras y de uniforme), masacraron la protesta estudiantil y dejaron esparcida sangre y consignas por doquier de los grupos estudiantiles manifestantes.
Los estudiantes miembros del Consejo Electoral de la Universidad Distrital, no se percataron de esta afrenta histórica o simplemente su capacidad no les permitió recordar estos momentos funestos para el movimiento estudiantil. Los profesores que hacen parte de este Consejo de forma ruin y mezquina aprobaron esta fecha. ¡QUE ATENTADO A LA DIGNIDAD Y A LA PROTESTA ESTUDIANTIL!
Varios estudiantes en su afán por figurar y obtener un poco de la torta presupuestal se inscribieron como candidatos para ser elegidos como representantes ante estos órganos políticos, en donde encontramos al señor Carlos Robayo, actual representante de los estudiantes ante el Consejo de Facultad de Ingeniería, al señor Wilson Martín, actual representante de los estudiantes ante el Consejo de Facultad del Medio Ambiente, y al señor Andrés Camacho, actual representante de los estudiantes ante el Consejo Superior. Estos tres personajes además de haber sido elegidos por un tiempo fijo para la representatividad en sus diferentes instancias, hacen parte de la alianza maquiavélica que respaldo la campaña del actual representante al Consejo Superior Miguel Ángel Barriga y del representante al Consejo Académico Joaquín Sandoval, quienes de forma improcedente y dolosa manejaron los hilos de Bienestar Institucional y de la Unidad de Extensión IDEXUD, llevando a estas dos dependencias a un grado de corrupción innombrable.
La participación en política tiene unos deberes y el más importante en el juego de la democracia es la responsabilidad ante sus electores, y estos señores demostraron en el transcurrir de este tiempo que el carácter de responsabilidad no esta inmerso ni en su discurso ni en su praxis y ahora lo demuestran de forma categórica dejando de lado las responsabilidades ante los Consejos a los que cada uno de ellos pertenece para saltar a la arena política de las elecciones 2007, con la única intención de defender los feudos obtenidos por el señor Sandoval y el señor Barriga, bajo el respaldo incondicional de Jorge Ramírez y Rosendo López, con el agravante de continuar en la búsqueda del detrimento académico por el que llevan a la Universidad Distrital los diferentes grupos de poder político que tienen cuna en esta institución.
Quedan otras dos listas, una de ellas en cabeza del señor Juan Carlos Toro y la otra en cabeza del profesor Mauricio Bueno (pues el nombre de los estudiantes de la Facultad Tecnológica no importa porque esta lista es propiedad de este señor, que pretende por todos lo medios apoderarse de la universidad, ya lo hizo en ASPU, ¿que más viene?), el señor Juan Carlos Toro es reconocido por su trayectoria política en la Universidad y en la localidad Ciudad Bolívar, donde habita, fue funcionario de Bienestar Institucional y de forma injusta no fue renovado su contrato por parte del señor Jorge Ramírez por ser amigo de los organizadores del Festival de Rock Universitario y bajo la presión del señor Barriga y del señor Sandoval quienes lo consideraban un peligro para sus turbios intereses en Bienestar, específicamente en la sede Macarena, donde el señor Toro desarrollaba sus obligaciones del contrato.
Realizando un mapeo de las pretensiones de cada uno de los candidatos y teniendo en cuenta su lastre político, intentando ser bastante objetivos en el análisis, podemos concluir lo siguiente:
1. Los candidatos que se postularon para ser representantes de los estudiantes ante los diferentes órganos de dirección y control de la universidad presentan en general el mismo plan de acción, según sus comentarios e historial retórico.
2. Los anquilosados poderes de la universidad y los nacientes, están aceitando su maquinaria para ponerla al servicio de uno de los candidatos pues todos ellos esperan contar con el voto del estudiante en el Consejo Superior Universitario para la elección de Rector por tres años.
3. Algunos de los candidatos esperan que lo poco que dejo Miguel Ángel Barriga y Joaquín Sandoval en Bienestar y en el IDEXUD aún se lo puedan repartir.
4. Como ha pasado por siempre en las elecciones y consultas en la Universidad Distrital, ganará no la mejor propuesta, ni las más consecuente con las necesidades de los estudiantes y de la universidad en general, si no que triunfará la más corrupta y la que más negociaciones haga con Antonio Caicedo, con Samuel Arrieta, con Jorge Ramírez y con Manuel Flores, como ha ocurrido en los últimos 10 años.
Como Grupo de estudio y debate político, les hacemos un llamado a todos los estudiantes de la Universidad Distrital para que se preocupen un poco por el futuro de esta institución, si bien es cierto que ya que estamos aquí nada peor nos puede pasar, tenemos una obligación moral y ética con la sociedad y es entregarle una Universidad de la que no nos avergoncemos y no se avergüencen, tenemos un deber político y es derrocar el poder establecido y la propiedad individual y debemos continuar el proceso donde la organización de las funciones sociales se haga espontáneamente, sin delegación de poder y sin gobiernos.
Bienvenido el representante que tenga esto en su plan de trabajo, no por nuestro impetuoso respaldo pero si porque puede estar seguro que la comunidad lo respaldará incondicionalmente y lo llevará al triunfo del estudiantado en nombre y cabeza de él.
ANAKAONA PRENSA LIBRE
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